Por mucho tiempo, la infraestructura de hosting se ha medido por su celeridad, confiabilidad y tiempo activo. Las empresas aceptaron cortos lapsos sin servicio como un peaje inevitable, análogo a las sacudidas esporádicas en un vuelo transcontinental. Pero, ¿y si la innovación pudiera anticipar las inestabilidades antes de su manifestación https://georgeh159jwg7.bloggadores.com/profile